lunes, 14 de marzo de 2016

¿POR QUÉ DAMOS NOS IMPORTA TANTO LA PENETRACIÓN EN LA SEXUALIDAD?

EN EL MUNDO HOMOSEXUAL SE HA CONVERTIDO EN ALGO BÁSICO EN EL QUE SE ADQUIERE UN ROL DE GÉNERO QUE OTROS SECTORES DE LA SOCIEDAD LUCHAN POR ELIMINAR.    
 Carlos Horrillo Terapeuta sexólogo y antropólogo social y cultural en Alicante
Pues sí, es una pregunta que me llama mucho la atención y que responde a si la evolución social en una sociedad tan progresista como la nuestra es algo que no parece estar en sintonía con los tiempos que vivimos.
Leyendo un artículo de una página colega “sexo en la piel”, donde comenta la excesiva importancia de la penetración que sufren las mujeres con vaginismo, me hizo reflexionar sobre qué es lo que está ocurriendo en el colectivo gay, ya que al respecto, parece ocurrir todo lo contrario y el tema de la penetración en el coito es algo que cada vez va adquiriendo más relevancia a la hora de contactar socialmente con los semejantes.
Este pasado fin de semana he colaborado como sexólogo, pero sobre todo como antropólogo en un evento que ha tenido lugar en la ciudad de Alicante, donde se han celebrado diferentes actividades comerciales unidas a la celebración del día internacional de la mujer. Ha sido un día magnifico y diverso donde se ha puesto de manifiesto la realidad de que las mujeres son tan diversas entre ellas como lo son con los hombres. Por supuesto esto es algo magnífico que pone un ápice de realidad en la lucha por la igualdad, y donde perfectamente pueden lucirse en una pasarela mujeres de todo tipo, más jóvenes o más mayores, más delgadas o más rellenitas; pero resaltando sobretodo que el grado de feminidad que ellas quieran tener no se lo impone nadie más que ellas mismas.
Pero aquí es donde empezamos a encontrar dificultades; a la hora de poder realizar una valoración diacrónica de esta lucha por la igualdad; no todos evolucionan al mismo tiempo, se tarda mucho tiempo en entender que los seres humanos somos iguales y punto, y es en la carencia de ver a una mujer transexual en el acto lo que me ha llamado la atención, porque obviamente una mujer transexual es tan mujer como la que más, pero parece que este tipo de normalización aún se resiste; lo difícil que es contentar a todos es difícil y se comprende a la perfección.
Pero ¿qué pasa con los gais? ¿Son elementos divergentes en cuanto a normalización de los seres humanos en general?
 Volviendo al tema de la importancia de la penetración en lo que ha sexualidad se refiere parece ser que sí; en el mundo homosexual cada vez se le da más importancia al rol que asume cada uno de los componentes que participan en el acto. A mí esto me sorprende muchísimo viendo lo contradictorio que supone en la normalidad social que queremos darle al asunto.
La igualdad se basa en la eliminación o en la modificación de los roles de género que se dan en todas las sociedades del planeta,  se lucha por acabar con los estereotipos de que el hombre no llora, que es fuerte y carente de emociones, o que la mujer ha nacido con códigos genéticos que las hacen ser unas magníficas expertas en los temas domésticos (barbaridades todas claro está), pero son roles adquiridos muy difíciles de eliminar. Sin embargo en el mundo gay, o al menos en lo que al contacto sexual se refiere está pasando todo lo contrario.
Ahora, cuando se socializa en un ambiente homosexual es básico indicar si eres pasivo o activo; a mí me da la sensación de que ya no sociabilizan nuestras mentes sino nuestros penes y culos, ya que si no cumples los requisitos demandados en el tema automáticamente eres descartado y dejas de interesar. Lo cierto que el mercadeo de carne es muy ágil en este sentido, y por si fuera poco la redes sociales aumentan todavía más esta selección de un montón de penes y culos relacionándose entre sí, dando sentido a la teoría de la  resonancia mórfica de las actitudes humanas no importa en la parte del mundo en la que te encuentres.
De paso diferenciamos los roles de géneros  en personas con el mismo género ya que lo interesante es el rol que adquiere el culo y el rol que socialmente posee el pene, uno como predestinado a la sumisión que antaño tenían los mujeres y el otro como parte dominante del asunto, y Por supuesto siendo extensible al resto del cuerpo y al ámbito social. Esta situación es bastante singular ya que es por lo que luchan el resto de colectivos, por esa eliminación de los roles. En fin sigamos divagando que seguro que tarde o temprano la humanidad avanzará en sincronía hacia una igualdad real.


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